Estás entre la espada y la pared: por un lado está ella, una de tus más fieles y entrañables amigas, y, por otro, su novio. Te damos las claves para que resuelvas de una vez por todas tu problemático dilema: te gusta el novio de tu amiga.
Nunca has sido la típica blanda enamoradiza que sale corriendo detrás del primer tío que pasa. Tampoco eres una perra ‘robahombres',
de ésas que se encaprichan con los novios ajenos.
Entonces, ¿qué eres? Pues una bellísima persona. Toda la culpa la tiene él, por estar tan bueno y ser tan genial. Y es que él, Dios mío, él es ideal para ti en todos los aspectos. Físicamente, es tu tipo: alto, fuerte, rubio y con cierto aire a James Dean.
Pero es que, además, el maldito tiene una personalidad arrolladora, su voz te hipnotiza y su conversación te fascina. Para colmo, tenéis los mismos gustos y os lleváis como uña y esmalte. Sin embargo, nadie es perfecto, y este tío 10 se convierte en un tío 9 porque padece un pequeño "defecto": tiene novia. ¡Te gusta el novio de tu amiga! Y sabes que está muy feo eso de pasarse el día haciéndose pajas mentales con el novio de una amiga, mirando fotos suyas y escuchando canciones como Best friend's boyfriend de Ke$ha. Estás embobada y obsesionada. Tanto, que te puedes acabar volviendo loca. Esto no puede ser. Lo mejor es que consultemos a una psicóloga para que te ponga los pies en la tierra.
Pero es que, además, el maldito tiene una personalidad arrolladora, su voz te hipnotiza y su conversación te fascina. Para colmo, tenéis los mismos gustos y os lleváis como uña y esmalte. Sin embargo, nadie es perfecto, y este tío 10 se convierte en un tío 9 porque padece un pequeño "defecto": tiene novia. ¡Te gusta el novio de tu amiga! Y sabes que está muy feo eso de pasarse el día haciéndose pajas mentales con el novio de una amiga, mirando fotos suyas y escuchando canciones como Best friend's boyfriend de Ke$ha. Estás embobada y obsesionada. Tanto, que te puedes acabar volviendo loca. Esto no puede ser. Lo mejor es que consultemos a una psicóloga para que te ponga los pies en la tierra.
El morbo de lo prohibido
En primer lugar, la psicóloga Ana García MacDougall te invita a analizar tus sentimientos: "¿Me gusta el novio de mi amiga de verdad o es sólo un capricho, una atracción de mi subconsciente por lo que considero intocable?" Es fácil: si cuando piensas en él te imaginas casándote, teniendo hijos, haciendo el amor o fugándote con él (y no precisamente en este orden), la cosa es seria.
Después, claro, tienes que ver si tú le gustas a él. Y, finalmente, si merece la pena arriesgar una amistad por una hipotética relación de pareja. La psicóloga afirma que "si es una buena amiga, tendrías que tratar de olvidarte de su chico, evitar las salidas conjuntas y alejarte de él. Si
Después, claro, tienes que ver si tú le gustas a él. Y, finalmente, si merece la pena arriesgar una amistad por una hipotética relación de pareja. La psicóloga afirma que "si es una buena amiga, tendrías que tratar de olvidarte de su chico, evitar las salidas conjuntas y alejarte de él. Si
no, debes afrontar el hecho de que estás poniendo en juego una gran amistad".
¿Le cuento la verdad?
Ten mucho cuidado. Si le confiesas a tu amiga que bebes los vientos por su novio estás jugando con fuego. La psicóloga advierte que "aún en el caso de que ella valore tu sinceridad, es probable que, a menos que confíe ciegamente en su novio, ponga distancia entre vosotras para prevenir". En efecto, tu amiga puede tomarse tu confesión como una amenaza.
Triángulo de amor bizarro
Ya desesperada, sin saber cómo salir de esta, piensas: "¿y si compartimos las dos a su novio?". Nuestra psicóloga no cree que sea buena idea: "Aunque podría funcionar sexualmente, emocionalmente sería un desastre, ya que siempre habría más vinculos con una chica que con otra". Todo es intentarlo. Si os va bien, seguro que en Arabia Saudí os podéis casar los tres. Lo de los hijos estaría un poco más complicado porque... ¿cómo les explicas que tienen un papá y dos mamás?
Fuente: .cosmohispano.com
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